El SPD no puede arreglar la casa

Y es que el SPD no se ha recuperado después del coup d'état veraniego contra Kurt Beck y las traciciones de Wiesbaden para formar el gobierno de Ypsilanti. El partido está más dividido que nunca y está perdiendo confianza entre los demás gobiernos y los demás partidos.

La semana pasada la gran coalición presentó una iniciativa de ley al mejor estilo orwelliano, el Big Brother Schäuble -Ministro del Interior- feliz anunció medidas para "proteger el Estado de Derecho" y protegernos contra posibles actos terroristas, las medidas incluyen búsquedas online, escuchas telefónicas, vigilancia dentro de tu propiedad con todo y escucha, y lo mejor, es que permiten éstas facultades sin necesidad de una orden judicial, claro para los casos de peligro inmediato. En febrero el Tribunal Constitucional reconoció que existe un derecho a la intimidad tecnológica y computacional, pero parece que a Schäuble poco le importa, y no es la primera vez, pues dos veces intentó pasar leyes para tirar aviones en pleno vuelo y llenos de pasajeros por si querían hacerle a la 11-S. Afortunadamente Karlsruhe dijo que no.

La ley está firmada por los dos partidos de la gran coalición: SPD y CDU. En el Bundestag fué aprobada con una mayoría de 375, mientras que 168 diputados estuvieron en contra y de los cuales 20 pertenecen al SPD, también 6 del mismo partido se abstuvieron. La ley pasa ahora al Senado, en donde no ha sido muy bien recibida. El Senado está conformado por miembros no electos sino nominados por los gobiernos de los estados, por lo que sus votos deben responder a las directivas de éstos.

A los estados de Sachsen y Schleswig-Holstein se han unido también en contra Sachsen-Anhalt, Rheinland-Pfalz y Berlin. Mientras que todos los que están gobernados en coalición con el FDP están también en contra. El FDP está planeando acudir al Tribunal Constitucional para la revisión de su constitucionalidad, pues dicen, Alemania se convertirá en un Estado Preventivo. El partido verde está preocupado pues dice que la ley daría al Bundeskriminalamt (Agencia Criminal Federal) facultades de servicio secreto. Mientras que Die Linke dice que es una licencia para la arbitrariedad.

El 28 de noviembre deberá votar el Senado o Bundesrat sobre éste compromiso de la coalición y lo más seguro es que no sea aprobada por lo que seguramente será necesaro conformar la Comisión de negocicación entre ambas cámaras.

Schäuble criticó duramente al SPD pues dice "estan internamente divididos y ya no son confiables, cuando la dirección del partido propon algo, debe uno estar seguro de que la base hará lo contrario"
El jefe del SPD Struck está también decepcionado por el comportamiento del SPD en los estados "la ley es buena, está firmada por los socialdemócratas"

La nueva ley del BKA permite no sólamente la persecusión e investigación de delitos, es decir delitos que ya fueron cometidos, sino también la prevención de éstos, tarea que tradicionalmente corresponde a las policías locales. La idea es darle al BKA facultades para prevenir atentados terroristas. Y para ello la autoridad podrá en caso de peligro inminente examinar computadoras privadas, así como escuchas y vigilancia a través de video en propiedad privada.



En Hessen mientras tanto el SPD vive una guerra civil, después de la debacle de Ypsilanti y la designación de Schäfer-Gümbel, pues el partido decidió iniciar procesos internos de sanción a "los cuatro traidores" que una noche antes de la elección anunciaron que no la apoyaban: Dagmar Metzger, quien ya desde antes había anunciado ésta decisión, Jürgen Walter, Carmen Everts y Silke Tesch. Pero antes de que todo acabara en felicidad, con los "traidores" sancionados y Dagmar Metzer anunciara su salida, resulta que el adversario de Ypsilanti para la nominación, Jürgen Walter, ha reclamado a su partido y quiere quitar a Andrea Yspilanti como jefa de la fracción. La razón? ella ganó la candidatura porque prometió un gobierno sin Die Linke, y al final acabó negociando siempre con ese partido. Ayer por la tarde el Landtag votó su disolución y la convocatoria a elecciones para enero, en su discurso Walter reclamó a Ypsilanti. El otro problema es la sustitución de Metzger, y es que nadie quiere su asiento, pues dicen, es un asiento perdido.

Mientras tanto Schäfer-Gümbel hace su lucha, pero parece que el SPD no tendrá un buen 2009, ya saben qué pedirle a Sankt Nikolaus.

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